Comités de crisis frente a la grave emergencia sanitaria y económico-social

A partir de marzo de 2020, cuando fue declarada la pandemia por COVID-19, desde el Partido Comunista hemos venido compartiendo nuestro análisis, y pronunciándonos sobre los efectos de esta emergencia sanitaria que ha expuesto en toda su magnitud la crisis capitalista mundial, dejando nuevamente es evidencia que, para la humanidad, el capitalismo es el problema y no la solución.

Los efectos de décadas de políticas neoliberales profundizaron aún más la indefensión de nuestros pueblos ante una amenaza de este tipo, con sistemas de salud vaciados, servicios sociales reducidos a su mínima expresión y la insolidaridad como norma en una economía dominada por las finanzas y la especulación.

Como contraparte, vemos como en Cuba, China y Vietnam, países gobernados por Partidos Comunistas que entienden a la salud como un derecho y no como una mercancía, la respuesta ante la pandemia no solo ha sido más eficiente, sino que han desarrollado vacunas para hacer frente a la misma, las cuales han sufrido el ataque feroz y concentrado de los medios hegemónicos y de los laboratorios del imperialismo.

El caso de Cuba, bloqueada y agredida desde hace décadas por el imperialismo, sigue siendo digno de admiración por el desarrollo alcanzado en sus vacunas para combatir el COVID-19 y esperamos que avancen las tratativas que se están llevando adelante con el gobierno argentino para su provisión en Argentina.

Para nuestro pueblo, el gobierno de Cambiemos fue una clara muestra de las políticas neoliberales, las mismas que siguen hoy levantando desde la oposición en plena coherencia con sus intereses de clase.

A poco de iniciar el año 2021, a la vez que comenzaron a aplicarse las diversas vacunas existentes, la certeza de una “segunda” y hasta “tercer” ola de la pandemia se hizo cada vez más presente.

Por estos días, el mundo entero sigue sufriendo los efectos potenciados de la pandemia y de un sistema que utiliza a las vacunas como un elemento más en su disputa por el poder sin importarle, como nunca le ha importado al capitalismo, las muertes que esto provoque.

En Argentina, superamos los 2,5 millones de contagiados, pasamos los 20 mil contagios diarios y ya debemos lamentar 58000 fallecimientos a esta fecha.

Frente a esto, el gobierno no se anima a tomar las medidas de fondo necesarias, que incluyen fortalecer los cuidados y aislamientos que exige la situación, por ejemplo, en el sistema educativo, y las derechas continúan con su discurso “libertario” e irresponsable, usando las muertes provocadas por la pandemia como un argumento de la campaña electoral.

Como dijimos en nuestras declaraciones anteriores: “Tras el inicio de la pandemia, cuando el gobierno actuó positivamente tomando las medidas sanitarias adecuadas para enfrentar la situación, se profundizaron los ataques desestabilizadores de las derechas que fueron provocando un desgaste en las medidas de cuidado.”

Ante esta situación, los intentos de naturalización y deshumanización de los efectos de la pandemia y desprecio por las medidas sanitarias se fueron profundizando.

Debemos entender que enfrentamos una emergencia sanitaria, económica y social que está provocando situaciones de gravedad extrema para nuestro pueblo.

A los efectos de la pandemia se suman los aumentos constantes de precios, sobre todo de alimentos, que profundizan la ya disminuida calidad de la dieta alimentaria de nuestro pueblo con los consecuentes agravamientos de enfermedades como la obesidad, la diabetes y la hipertensión entre otras.

Tan importante como estas situaciones, son aquellas que se potencian por el contexto de la pandemia y de las dificultades económicas provocando serios efectos sobre la salud psíquica de la población, estrés, depresión y el aumento de la violencia familiar y de géneros en este contexto.

En esta difícil coyuntura, en la cual debemos actuar con solidaridad y responsabilidad, desde el Partido Comunista proponemos que las organizaciones populares conformen Comités de crisis efectivos para actuar en el territorio sobre esta emergencia promoviendo la coordinación de los Centros de Atención Primaria de salud en cada barrio y localidad, de lxs trabajadorxs de la salud, docentxs, sindicatos, organizaciones vecinales, barriales y territoriales para conformar un gran movimiento que actúe concretamente en defensa de la salud.

Proponemos la creación de Comités de Crisis a todos los niveles, conformados por el Estado, organizaciones políticas, de trabajadores, PYMES, sociales y juveniles y organismos de DDHH, que garanticen las condiciones humanitarias en todo el territorio nacional.

Medidas de emergencia:

1. Acelerar y descentralizar la vacunación facilitando el acceso.

2. Organizar en cada lugar concreto los aislamientos programados selectivos e intermitentes, teniendo en cuenta la saturación que ya se está viviendo en diferentes localidades y provincias del sistema sanitario.

3. Suspender provisoriamente las clases presenciales mientras persista la gravedad de esta situación como están reclamando varios gremios docentes.

4. Asegurar la centralidad del Estado Nacional en la adquisición y distribución de las vacunas

5. Tomar medidas efectivas contra la infodemia y el llamado a desobedecer las restricciones decretadas por el gobierno.

6. Garantizar el apoyo económico a los sectores vulnerables y a quienes deban cerrar sus actividades, retomando los planes de asistencia específicos que fueron discontinuados.

7. Movilizar a los centros de estudiantes y las organizaciones juveniles, sociales, políticas y deportivas para que los jóvenes puedan expresarse, tener apoyo psicológico, afectivo que permita cumplir las restricciones y los periodos necesarios de aislamiento.

8. Acelerar la conectividad en todo el territorio haciendo llegar dispositivos y conexión a los estudiantes y docentes que no lo tienen.

9. Apoyo a lxs trabajadores de salud del sistema público. Sueldos dignos y jornadas laborales que contemplen el factor humano, para que puedan atender la demanda creciente y evitar fatiga, estrés contagios y muertes.

10. Implementar la Ley de Abastecimiento. Control de Precios a nivel local entre municipios y Movimientos Sociales.

11. Derogar las tarifas dolarizadas en servicios, reestatización de las empresas concesionadas bajo control democrático de sus trabajadores y usuarios.

12. Impulsar una verdadera distribución de la riqueza y una drástica reforma tributaria integral y progresiva, con una reforma impositiva que afecte permanentemente a las grandes fortunas y las ganancias extraordinarias que se mantienen exentas de tributar.

Secretariado Nacional del Partido Comunista de la Argentina

13 de abril de 2021

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