El coronavirus y el capitalismo tienen vidas paralelas. En Italia el virus se propagó inicialmente en los centros neurálgicos del capitalismo peninsular de la mano de viajerxs que habían vuelto de China. En la Argentina, se propagó con la llegada de viajerxs provenientes de Europa. Pero capitalismo y coronavirus van de la mano también porque existen empresarios que están especulando y que hacen negocios ubicados “de los dos lados del mostrador”. Lxs capitalistas que tienen intereses en el sistema sanitario privado y que además son dueñxs de fábricas, no quieren que la economía se pare, ni siquiera por un momento, para privilegiar sus ganancias incluso a expensas de la vida humana.
Techint-Tenaris
En Italia, la Val Seriana, a causa de las estrechas relaciones económicas con China, se infectó de inmediato, probablemente también debido a los técnicos y gerentes que continuaron viajando entre Italia y China por interés económico, incluso cuando el gobierno italiano ya lo había prohibido. Siempre para salvaguardar estos mismos intereses económicos, este valle nunca fue declarada zona roja y por lo tanto nunca entró en una cuarentena estricta.
Por lo tanto, las actividades económicas continuaron y continúan, obligando a lxs trabajadorxs a ir a trabajar y nunca se limitaron las entradas y las salidas de las ciudades y los pueblos de la zona. Esto permitió la infección primero en el área de Bérgamo, luego en la Región Lombardía y luego en el norte de Italia.
En la zona de Bérgamo, que según el Washington Post es ahora el área más infectada del planeta, está ubicado uno de los polos industriales más importantes de Italia. Una de las empresas de la zona es TENARIS, propiedad de Gianfelice Rocca, quien pertenece al holding transnacional Rocca. La Confindustria –la patronal industrial– presionó a las instituciones públicas para que las fábricas siguieran en estado de actividad y… lxs trabajadorxs, trabajando y por lo tanto enfermándose.
Mientras la pandemia explotaba, la Confindustria de Bérgamo impulsó incluso una campaña en las redes sociales con el hashtag #YesWeWork para crear sentido común a favor del mercado, de la economía, de la ganancia y del capital.
Gianfelice Rocca es también presidente del grupo Humanitas, con intereses ubicados en el sector de la sanidad privada en que posee clínicas en la misma Bérgamo. Para el mundo empresario italiano, que en parte coincide con el mundo empresarial argentino, el capital está por encima de la salud y de la vida de la clase trabajadora. Cuando un empresario está ubicado de los dos lados del mostrador, es decir, cuando tiene empresas y hospitales, la ecuación que articula es: a más trabajadorxs trabajando, más trabajadorxs enfermxs. Sin embargo, es todo el sector de la salud el que se ve afectado por la lógica de las ganancias. En Italia la prevención de la salud pública en el territorio se ha desmantelado en beneficio de la hospitalización de los enfermos en instalaciones hospitalarias grandes y a menudo privadas. Este modelo fue la causa de la incapacidad de la salud de la Región Lombarda para detectar la llegada del virus y enfrentarlo cuando aún era posible: por esto la situación salió fuera de control y causó, según se calcula, el exterminio de alrededor de 10,000 personas sólo en la zona de Bérgamo.
Direzione Nazionale
En la Argentina, dónde rige una cuarentena según los parámetros de la OMS, el grupo Techint, conducido por Paolo Rocca, desafiando un decreto presidencial que prohíbe los despidos, echó a 1450 trabajadores de su plantilla y viene impulsando en la Ciudad de Buenos Aires el desarrollo de un proyecto con el nombre de “Complejo Hospitalario Sur”. Esta propuesta empieza a implementarse en 2010 cuando el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires era Mauricio Macri. Se trata de una obra de 172 millones de dólares que consiste en unificar cinco hospitales de la Ciudad en uno solo. Las estructuras en cuestión son: el Hospital Municipal de Oncología “Marie Curie”, el Hospital de Rehabilitación Respiratoria “M. Ferrer”, el Hospital de Gastroenterología “Udaondo”, el Instituto de Rehabilitación Psicofísica (IREP) y el Hospital de Infecciosos “Francisco Javier Muñiz”. El pretexto de la unificación es crear un hospital de alta complejidad. De llevarse a cabo, el mantenimiento de las instalaciones, del equipamiento y la limpieza de los edificios estaría a cargo de Techint. Lxs trabajadorxs del sector de salud se resistieron a la iniciativa Techint + macrismo CABA y lo hicieron porque ese negocio implica tanto el cierre de hospitales como el fin de la atención pública sanitaria para ceder espacio a clínicas privadas.
El capitalismo mata, siempre, en las distintas latitudes del mundo. Y sus sicarios son los empresarios globales. En contra de estas lógicas el Partido Comunista de la Argentina y Rifondazione Comunista declaran su repudio a las acciones del grupo Rocca en nuestros países y promoverán iniciativas y acciones junto a otros sectores populares en defensa del sentido irrestricto de la vida de la clase trabajadora y los pueblos.
El comunismo es humanidad.
¡DEFENDAMOS LA SALUD Y LOS PUESTOS DE TRABAJO!
Partido Comunista de la Argentina
Partido de la Refundación Comunista – Izquierda Europea (Italia)