La Liga Argentina por los Derechos Humanos (creada en 1937 como LADH) asume la propuesta de marchar el primero de febrero de 2022 para exigir la renuncia de los miembros de la Corte Suprema de la Nación, colonizada al servicio de la dominación imperial, la impunidad para los genocidas y los delincuentes de la deuda externa, así como para la persecución de las y los que luchan por los derechos populares.
Nos entusiasma la idea de un proceso de auto convocatoria popular que interpele a los miembros de la Corte pero también ponga de relieve las complicidades explícitas e implícitas, las de Macri y sus cómplices de los grupos de tareas judiciales, de la AFI, de los medios, del Congreso, etc. Pero también de las y los que en dos años solo comentaron o mandaron mensajes por las redes sociales.
A esta marcha queremos sumar nuestros reclamos más dolorosos: la Corte Suprema tuvo en un cajón el expediente CSJ 000082/2013(49-H) sobre el secuestro con torturas seguido de muerte de un militante de la Federación Juvenil Comunista de quince años de edad, Floreal Edgardo Avellaneda, desde el 24/6/2013 al 13/08/2021 y la causa sigue “atrapada” en Casación Penal por los abogados de los genocidas. que son quienes verdaderamente mandan en estos procesos. Floreal Edgardo Avellaneda, secuestrado en abril de 1976, es lo más posible que llegue a abril de 2022 sin que sus asesinos tengan sentencia firme: 46 años de impunidad y esta Corte Suprema es la culpable.
Y también la complicidad de la Corte por acción u omisión en todos los treinta y siete casos de presos políticos de la Argentina, desde Milagro Sala a Facundo Molares, desde Ricardo Jaime a Facundo Jones Huala, desde los sindicalistas de la UOCRA a los militantes del Frente de Izquierda.
Por todos ellos, pedimos castigo
Por todos ellos exigimos la renuncia de la Corte Suprema
Por todos ellos, todos el primero de febrero a la calle, que ya es hora.