Es hora de cooperación regional y no de espolear conflictos
Con fuerte preocupación recibimos la decisión del Presidente Sebastián Piñera de reinstalar en el escenario político una controversia de soberanía entre Chile y Argentina sobre la plataforma continental al sur de Tierra del Fuego.
Consideramos que una verdadera disputa de soberanía debiera plantearse entre los intereses nacionales conjuntos de dos países hermanos ante las pretensiones de las corporaciones transnacionales y de potencias imperialistas de controlar estratégicamente el paso interoceánico, el acceso a la Antártida y los mares australes para saquear nuestros recursos naturales, incluyendo la presencia colonial y la reforzada militarización de las Islas Malvinas y espacios marítimos circundantes.
Denunciamos a las derechas gobernantes chilenas por la utilización político-electoral de un supuesto patriotismo y de un divisionismo regional que conspira contra la cada vez más necesaria unidad latinoamericana y caribeña.
El gobierno de Piñera, de prosapia pinochetista, y atravesado por un profundo deterioro, desentierra una controversia ya cerrada en un nuevo intento por fracturar la región cuando se registra una grave crisis de la OEA y crece la idea de un nuevo sistema de integración regional no injerencista y libre de la presencia hegemónica de los EEUU.
Y lo hace en las vísperas de una trascendente cumbre de la CELAC, en la que se podrían dar pasos significativos en esa dirección.
Valoramos las vías diplomáticas y jurídicas en curso, pero entendemos necesario enfrentar políticamente los planes que atentan contra el mandato histórico de avanzar hacia la Patria Grande que soñaron los líderes de nuestras gestas independentistas.
Del mismo modo, nos solidarizamos con las luchas del pueblo chileno y sus fuerzas de izquierda y progresistas por sus derechos y deseamos éxitos a su gran conquista democrática, la Convención Constituyente.
Jorge Kreyness
Secretario de RRII
Víctor Kot
Secretario General